GERMAINE DERBECQ

LE QUOTIDIEN

18 de Diciembre de 1954

LAS EXPOSICIONES

Por Germaine Derbecq


Las Exposiciones


La Escuela Nacional de Cerámica, en Muller


Como todos los años en la misma época, la Escuela Nacional de Cerámica presenta los trabajos ejecutados durante todo el año por sus alumnos.

Son innumerables objetos utilitarios o decorativos, que toman prestados todos los estilos, incluso intentos modernos. Dicho al pasar, las esculturas son las más logradas.

Es agradable la sorpresa de no encontrarnos sumergidos en mediocridades, como es tan habitual en este tipo de exposiciones.

Por otro lado, es interesante notar un deseo de evadirse de los deberes de la escuela, de hacer una obra personal.

Sentimos que una mano firme dirige esta escuela. El director, Fernando Arranz, excelente técnico y artista, guía con claridad los talentos, tan diferentes entre sí, de sus 150 alumnos, dándoles cierta independencia siempre manteniéndose en los límites permitidos a una escuela nacional.

La cerámica vive, desde hace ya algunos años, un verdadero entusiasmo debido a algunos grandes artistas que han realizado obras excepcionales. Sin embargo, no podemos hablar de renacimiento ya que, para la mayoría, no es más que un arte de entretenimiento, el de los ceniceros y de los floreros decorativos. Pero es un arte que demanda una gran cantidad de cualidades juntas: las de pintor, de escultor, de técnico y de sentido de las posibilidades de la materia, que son infinitas.

El día que la cerámica encuentre su verdadero destino, encontrará su expresión actual. Por el momento, es un límite y marcha atrás. Las grandes épocas de la cerámica, en la que era un arte, fueron las de su mayor utilidad.


El arte chino en la Sociedad Central de Arquitectos


Esta exposición está presentada por la Asociación Argentina de Cultura China.

Entre las obras del siglo xvii, los grabados en mármol impresos sobre papel de arroz están dibujados de un trazo firme, vivo, preciso. Es cierto que se le agrega un no-se-qué, como un “heraldismo”, debido, sin dudas, al clasicismo de las formas que los artistas observan siglo tras siglo, casi sin alejarse.

Hay también pinturas sobre seda, paisajes o animales de una realidad verídica, como atrapados en vivo por un trazo sintético.

Otros paisajes muy delicadamente indicados son los que puede dibujar un pueblo tan refinado. Grandes blancos, utilizados muy sabiamente, expresan atmósfera y luz.

Acuarelas luminosas, simples ramas con flores estilizadas, aunque modernas, son idénticas a las del siglo anterior.

Finalmente, son más fragmentos de la decoración mural que decora los templos y algunos objetos y bibelots ejecutados por artesanos.

Entre ellos, minúsculos caballos, simples objetos de bazar, que tienen un realismo atrapante por sus formas y movimientos. Este resultado no puede ser el producto de una sola vida pero de múltiples vidas de artistas. El arte chino es, más que ninguno, un arte colectivo milenario.

Este pueblo, que mira más hacia el pasado que hacia el futuro, guarda en sus artes una continuidad: la fuerza, reproduciendo, a través de los siglos, las mismas formas sin cansarse jamás, enriqueciéndolas sin renovarlas, impartiéndoles siempre el mismo misterio.

Ahora que un nuevo orden va a hacer crujir los viejos cuadros, nos permitimos preguntar si los artistas guardarán lo adquirido ancestralmente y como podrán aprovecharlo.


7ma Exposición del Arte de la Propaganda en Witcomb


Es bastante raro ver un bello afiche publicitario. La mayoría es banal, únicamente comercial. Esta exposición lo confirma. Nos preguntamos la razón, ya que numerosos artistas son totalmente capaces de concebir afiches simples y directos, obsesos, persuasivos y plásticos al mismo tiempo.

Sería interesante que las grandes empresas, que tienen productos para lanzar al mercado, se den cuenta de esto permitiéndoles a los artistas argentinos desarrollar un arte mural. Esto sería un bello elemento decorativo en las ciudades y en las campañas.

No es solamente el afiche que es mediocre en esta exposición, los otros medios publicitarios no valen mucho más. Sin embargo, nuestra época, que es la de la publicidad o de la propaganda, puso a punto procesos tipográficos, montajes fotográficos, nuevas maneras de editar, y realizó descubrimientos gráficos modernos de los cuales nos podemos inspirar y aprovechar.


Esculturas orientas en Viau


Esta exposición presentada por los Amigos del Arte Oriental comprende esculturas de China, de Japón, de Camboya, de Siam,[1] de Egipto y de Asiria.[2] Todas piezas de primera calidad pertenecientes a coleccionistas argentinos.

Si bien las esculturas son expresiones clásicas del arte oriental, la mayoría posee características particulares excepcionales.

Entre las más destacables, una cabeza de hierro china, del siglo xvi y de una frescura en su confección sorprendente: la luz acaricia las formas y las hace vivir. Luego un bajo relieve representando al dios del viento, del cual la composición, el movimiento, los planos y los ornamentos forman un todo perfecto.

Encontramos también una cabeza japonesa del siglo xiii, extraordinariamente viva, y una cabeza de piedra patinada de la época Han, en la cual el dibujo primitivo se casa completamente con el volumen casi cúbico que irradia una fuerza interior y una intensa expresión.

Deberíamos nombrarlas a todas. Ninguna pieza nos es indiferente.

En cuanto a los dueños de estas obras de arte, sin lugar a dudas son verdaderos coleccionistas. Los veo como a los que, a través de las épocas y de las escuelas, saben reconocer las obras de las cuales las características se identifican con su propia comprensión del arte.


Cerámicas de Pelicaric en Galatea


Estas cerámicas son las de un pintor. Siendo el material y el color las principales preocupaciones de este artista.

Ciertos indicios hacen pensar que podría agregar, próximamente, las búsquedas de los espesores, no porque la forma los necesite, sino que para enriquecer aún más la materia.

Pelicaric debería abandonar ciertos efectos decorativos y perseverar en la indagación de una más alta concepción. La que testimonian ciertos objetos de su exposición, que son más excepcionales, y son probablemente la expresión de su verdadera personalidad.


[1] N de la T: Siam es actualmente Tailandia.

[2] N de la T: Territorio que hoy son, en todo o en parte, los países de Siria, Líbano, Turquía, Irak e Irán.


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